¿Alguien de la alcaldía de Coyoacán que pueda destrabar un trámite en Recursos Humanos, donde las secretarias se pasan el día comiendo tortas y en el chisme y poniendo obstáculos para expedir documentos necesarios para la jubilación de doña Ros? Ni el alcalde, ni el segundo de a bordo, ni el la Contraloría y mucho menos el director de Recursos Humanos están en sus oficinas, buscarlos es como echarse un clavado en un pajar para buscar una aguja.
¡Qué impotencia!